Los criterios ESG (ambiental, social y de gobierno) se refieren a los factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo que se tienen en cuenta al invertir en una empresa de agronegocios. Las empresas incorporan cada vez más los ESG a su lenguaje ya que los inversores cada vez dan más importancia a estos criterios a la hora de elegir una u otra inversión.
Cada nuevo proyecto relacionado con la producción de alimentos (agronegocios) tiene que demostrar que está en línea con criterios aceptables desde una perspectiva ambiental y social.
No es por una cuestión de aumentar la rentabilidad, sino por una cuestión de conciencia de que debemos encontrar la manera de producir alimentos acordes con los impactos ambientales. En LATAM la responsabilidad es doble, por el rol geopolítico que tienen países como Argentina, Brasil, Paraguay o Uruguay en la producción de alimentos. Con la responsabilidad de producir gran parte de los alimentos del mundo, deberían trabajar para hacerlo de manera adecuada.
Los proyectos que pueden desarrollar una estrategia ESG convincente se convierten en proyectos que los inversores institucionales comienzan a analizar, no solo los inversores regionales. Los inversores a largo plazo valoran la sostenibilidad mucho más que la oportunidad.
Ven el atractivo de producir alimentos para el mundo, en un lugar donde los recursos naturales permitan hacerlo de manera amigable con el medio ambiente, en un entorno social y siendo al mismo tiempo una inversión rentable.
Por Verónica Rodríguez, Finanzas Corporativas de Auren Uruguay